BODAS DE ORO

Llegando a estas alturas de la vida
en que el tiempo transcurre sosegado,
al mirar otra vez hacia el pasado
despierta la memoria adormecida.

Cuando se ha completado la medida
del duro caminar codo con codo,
y ya de dos mitades ha hecho un todo
medio siglo de lucha compartida.

Desde aquel, si me otorgo, aventurado,
al que amor y deseo haciendo coro
en las bodas de miel fue pronunciado.

El tiempo nos brindó el mejor tesoro,
volverlo a pronunciar ratificado
al repetirlo hoy en bodas de oro.